El
presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Salazar Lomelín
informó que las empresas constructoras de los ductos para transportar gas
natural deberán devolver a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) el dinero
recibido por las cláusulas de fuerza mayor.
De acuerdo
con el empresario, las cláusulas de este tipo son comunes en contratos como
estos y sirven para ampararse en caso de que no se acabe el contrato en la
fecha acordada o que una causa de fuerza mayor inhiba o prohíba se continúe la
construcción.
Según datos
de la empresa estatal, el monto por dichas cláusulas asciende a 2 mil 993
millones de dólares.
En este
contexto, el líder empresarial dijo que “la buena noticia para la CFE es
que, en general, todas las compañías que habían cobrado por causas de fuerza
mayor estuvieron dispuestas a regresar los montos obtenidos, y en algunos casos
de más plazos en el contrato, a cambio de hacer un ‘mix’ entre lo rebajado más
dicha fuerza”.
Agregó: “Por
estas cláusulas de fuerza mayor, junto con las diferencias entre las tarifas de
transportación del gas natural de cada contrato, fue que la negociación entre
la CFE y las cuatro empresas constructoras de ductos se tornó compleja.
La
compañía Fermaca sigue en negociación de su contrato”.
“Normalmente
estas causas de fuerza mayor operan para los dos lados: si eres el contratante
y no te dieron el gas en el tiempo adecuado o la electricidad puedes cobrar por
la causa de fuerza mayor”, explicó.
Por su
parte, Roger González Lau, presidente de la Comisión de Energía del CCE
aclaró que en el futuro, si hubiera un evento de fuerza mayor que activara de
nuevo estas cláusulas, ya estando en operación el activo están cubiertas por
seguros.
CFE
exigió a la empresa Carso Energy por el gasoducto Samalayuca-Sásabe 403 millones
de dólares.
Mientras
que a IEnova, 842 millones de dólares, por el ducto Guaymas-El Oro. Asimismo, a
TransCanadá y Fermaca 848 millones de dólares por el ducto Tula-Villa de Reyes-
Aguascalientes.
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