Por Gabriela
Hernández.
Pese a
las protestas de familiares de víctimas de delitos, el Congreso de Puebla
designó a Gilberto Higuera Bernal como titular de la Fiscalía General del
Estado (FGE) para el periodo 2020-2027.
Desde la
mañana, integrantes del Colectivo Voz de los Desaparecidos en Puebla
marcharon por las calles de la ciudad y se plantaron frente al Congreso para
denunciar que, en los 17 meses que estuvo como encargado de despacho en la
Fiscalía, Higuera Bernal no hizo nada para localizar a sus familiares.
Afirmaron
que tuvieron que padecer corrupción y hasta la complicidad de la institución
con la delincuencia.
Tras las
comparecencias de los tres aspirantes, que duraron alrededor de siete horas, los
diputados sometieron el nombramiento a votación secreta.
Higuera
Bernal obtuvo 38 votos a favor y ninguno en contra, mientras que Maricela
Pichón sólo recibió un voto y Guadalupe González Vargas ninguno.
El
diputado del Partido del Trabajo (PT), José Juan Espinosa Torres, abandonó la
sesión luego de asegurar que el proceso de selección del Fiscal estaba viciado,
por lo cual debería reponerse.
Acusó
que, tal como ocurrió en la designación del presidente de la Comisión Estatal
de Derechos Humanos y del titular de la Auditoría Superior del Estado, los
legisladores volvieron a cometer faltas al proceso de selección.
“Están a
punto de cometer un tercer error si continúan con esta sesión donde pretenden
imponer la voluntad del gobernador Miguel Barbosa Huerta”, expresó.
Lo
anterior debido a que, horas antes de la sesión, el presidente del Congreso,
Gabriel Biestro Medinilla, descalificó a uno de los participantes por no haber
entregado el registro y acreditación del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Espinosa
Torres cuestionó que, pese a este supuesto faltante, los diputados integraron a
González Vargas en la lista de aspirantes que propusieron al gobernador, y que
finalmente Barbosa incluyó en su terna final.
“Esta
terna no es terna, es un montaje teatral”, acusó el diputado, al reclamar que
se debe reponer el proceso porque no había piso parejo entre los aspirantes, lo
que podría derivar en otro proceso impugnado.
Recordó
que el desempeño de la Fiscalía ha sido cuestionado en los meses en que Higuera
Bernal ha estado al frente, y más ahora por la crisis que surgió a partir del
asesinato de tres estudiantes universitarios.
Pese a
estos cuestionamientos, la designación de Higuera Bernal se daba por hecho
desde que el titular de la Fiscalía, Víctor Carrancá, acudió a presentar su
renuncia, pues el gobernador había reconocido públicamente su trabajo.
Originario
de Sinaloa, donde fue Procurador en 1999, con el gobierno del priista Juan
Millán Lizárraga, el recién nombrado Fiscal de Puebla fue uno de los
colaboradores cercanos a Genaro García Luna, actualmente preso en Estados
Unidos acusado de brindar protección a Joaquín Guzmán Loera El Chapo, líder del
Cártel de Sinaloa.
Los seis
años que García Luna fue secretario de Seguridad en el sexenio de Felipe
Calderón –de 2006 a 2012–, Higuera Bernal fue titular de la Unidad de Asuntos
Jurídicos de esa dependencia.
Además, Higuera
Bernal fue, de 2003 a 2006, subprocurador de Control Regional, Procedimientos
Penales y Amparo de la PGR, por lo que fue uno de encargados de llevar el
proceso de desafuero del hoy presidente Andrés Manuel López Obrador.
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