Darío Celis
- 31/07/2019
Citibanamex
está en una situación complicada. Pelea con sus fantasmas del pasado al tiempo
que intenta reposicionarse en el ánimo de la 4T, que encabeza el presidente
Andrés Manuel López Obrador.
Así quedó de
manifiesto hace una semana: Citi Research tituló su análisis “Estancamiento
sin rebote a la vista”, para justificar un drástico ajuste a sus previsiones de
crecimiento económico de 0.9 a solo 0.2%.
Y un día
después, el director de Estudios Económicos de Citibanamex, Alberto Gómez
Alcalá, salió a matizar el mensaje al decir que si bien existe una caída
generalizada de la economía, “no hay recesión”.
Ese
sentimiento encontrado tiene un origen en las cabezas que condujeron el destino
de Banamex tras su reprivatización en el gobierno de Carlos Salinas, una
génesis que Citi ahora quiere borrar.
Los
fantasmas se llaman Roberto Hernández, Alfredo Harp, Manuel Medina Mora, Javier
Arrigunaga y Francisco Gil Díaz, quienes impusieron un estilo de hacer banca en
el que el común denominador fue el tráfico de influencias.
Hoy Citi,
que preside Michael Corbat, y particularmente Ernesto Torres Cantú, como cabeza
de Citibanamex, luchan por exorcirzar esos demonios que tuvieron un costo
reputacional muy alto para el llamado Banco Nacional de México.
Y también hoy,
dos casos de los que ya hemos platicado aquí cobran relevancia: Oro Negro y
Oceanografía. El primero por las órdenes de aprehensión contra sus accionistas,
y el segundo por la detención de Erik Cervantes.
En los dos
casos el hilo conductor es Gil Díaz. El ex secretario de Hacienda en el
gobierno de Vicente Fox construyó una estructura de altos directivos con cuyas
relaciones traficó para beneficio de los suyos.
Casi
simultáneamente consiguió de la afore Banamex, que todavía encabeza Luis
Sayeg, 300 millones de dólares para invertirlos en la empresa de su hijo,
Gonzalo Gil White, y su sobrino, José Antonio Cañedo White.
Casi al
mismo tiempo Martín Díaz Álvarez, director financiero de Oceanografía,
presidente de la Caja de Ahorro Libertad y primo de Gil Díaz, tuvo acceso
ilimitado a fondos de Banamex.
A
principios de la década pasada era muy común encontrarse en los comedores de
Banamex o en restaurantes de Santa Fe a Gil Díaz y Díaz Álvarez departiendo con
ejecutivos del banco.
Tenían
ascendencia sobre ellos y en integrantes del Comité de Riesgos de la afore,
como el mismo Sayeg, Juan Mijares, Cynthia Sánchez, Christopher Michael
Robinson, Víctor Manuel Murillo o Xavier María de Uriarte.
Ese
tráfico de influencias, que catapultó grandes negocios que hoy están en la
ruina, le costó muy caro a Citi, que en la actualidad hace malabares para
congraciarse con la 4T.
RESULTA QUE EL
Notario 153 de la CDMX se niega a dar a la defensa de Emilio Lozoya Austin
copias certificadas de la compra de la casa de Lomas de Bezares, argumentando
que le quedaron a deber sus honorarios. Qué poca memoria. El 29 de noviembre
del 2012 la señora Gilda Austin de Lozoya le extendió, a nombre de su hijo, un
cheque por un millón 969 mil 420 pesos para pagar impuestos y sus servicios. El
notario liquidó un millón 729 mil 590 pesos, o sea, hasta le sobraron 239 mil
828 pesos. Si la Fiscalía General de la República, que comanda Alejandro Gertz
Manero, dice que dicha casa se pagó con fondos de procedencia ilícita, a tal
grado que la mamá del ex director de Pemex está detenida, el notario está en
verdaderos aprietos porque lo pueden involucrar en delincuencia organizada.
¿Sabe cómo se llama el notario? Jorge Antonio Sánchez Cordero, sí, el hermano
de la secretaria de Gobernación.
ANDA
CIRCULANDO POR varios lados una lista de 200 personas físicas que concentran 7
mil 44 millones de pesos por concepto de honorarios asimilados a salarios
pendientes de pagar al Servicio de Administración Tributaria. El documento lo
generó el organismo de Margarita Ríos-Farjat y se le dio vista a la Unidad de
Inteligencia Financiera, que capitanea Santiago Nieto, a fin de investigarlos.
Algunos nombres que destacan son los de Vicente Fox Quesada, León Manuel
Bartlett Alvarez, Blanca Treviño, Humberto Lobo de la Garza, Emilio Loret de
Mola, Francisco Javier Borgio, Jack Landsmanas Stern, Ernesto López Clariond,
Edgar Farah Rubiera, Humberto Armenta, Sergio Rosengaus y Luis Doporto
Alexandré.
EN EL
PLEITO que los constructores de ductos sostienen con la CFE vaya que esta
última salió buena para chicanear el litigio. Mientras IEnova, Transcanada,
Carso y Fermaca van por postular a un solo árbitro que los represente ante la
Corte Arbitral de Londres, los pupilos de Manuel Bartlett Díaz quieren asignar
hasta 6 diferentes árbitros. En el fondo se busca prolongar el proceso, aunque
ello le cueste más. Por cierto que es un hecho que la llamada empresa
productiva del Estado lleva como abogado al Instituto de Investigaciones
Jurídicas de la UNAM, toda vez que recién el bufete Martínez, Algaba, De Haro y
Curiel de Roberto Martínez, Ernesto F. Algaba, Jorge de Haro y Javier Curiel declinó
la invitación de trabajarles probono.
HOY EL
GOBIERNO de la CDMX recibe ofertas por el puente vehícular de Cuemanco-Canal
Nacional, en el extremo sur del Periférico. Se trata de una vialidad a la
altura de Xochimilco que costará alrededor de 500 millones de pesos. Le decía
que todos los interesados pidieron una prórroga pues las huestes de Claudia
Sheinbaum dieron a los participantes escasos 14 días para compilar una serie de
estudios e información. Solo Gami, la de Manuel Muñozcano, se reportó listo. Se
cree que contaron con información privilegiada y que desde hace tres meses
están haciendo estudios y calculando costos. Ellos ganaron el Cablebús.
LA FAMOSA
ADJUDICACIÓN del arrendamiento de mil 855 patrullas que costó 3 mil 300
millones de pesos y que tanto presumió hace unas semanas la misma Claudia
Sheinbaum y su secretario de Seguridad Ciudadana, Jesús Orta Martínez, generó
mucho descontento al interior de la red de distribuidores Chrysler. Se
argumenta que cada unidad terminó costando 1.8 millones de pesos. Patrullas de
lujo con grandes servicios postventa y equipamiento de primer mundo que nada
tiene que ver con la austeridad republicana que tanto pregona Andrés Manuel
López Obrador. La licitación la operó la secretaria de Finanzas, Luz Elena González,
ex abogada del Grupo Kosmos.
TAL CUAL LE
informé, Maypo ganó la distribución de medicamentos en la CDMX. A ver cómo
rayos le hace para no quebrar: cotizó a 57 centavos la pieza, cuando en las
pasadas compras consolidadas cobraba entre 5 y 6 pesos la pieza. Simplemente
no le van a dar los núneros a los muchachitos de Carlos Arenas.
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