Por Beatriz
Pereyra.
El
presidente de la Federación Mexicana de Asociaciones de Atletismo (FMAA,)
Antonio Lozano, fue sentenciado este miércoles a seis años de prisión, no
conmutables por el delito de peculado
De acuerdo
con la sentencia del juez Séptimo de Distrito en procesos penales federales, Lozano
deberá además reparar el daño a la Conade, lo que lo obligará a devolver 4.8
millones de pesos que recibió en 2011 y 2012 a través de los fideicomisos Fondo
Nacional para el Deporte (Fonade, ya desaparecido) y Fondo Nacional para el
Deporte de Alto Rendimiento (Fodepar).
Lozano
fue detenido el lunes 19 de diciembre de 2016 por agentes de la Procuraduría
General de la República (PGR) y trasladado al Reclusorio Sur, en la Ciudad de
México.
A
principios de 2017 pagó una fianza para poder llevar su proceso en libertad,
sin embargo, en cualquier momento será detenido nuevamente.
La sentencia
puede ser apelada.
Causa penal
De acuerdo
con la causa penal 56/2016, en marzo de 2012, la Conade, a través del
Fodepar, otorgó a la FMAA 2.3 millones de pesos por concepto de compra de
suplementos alimenticios.
Lozano
comprobó esos recursos con una factura de Comercializadora Hegue de México,
empresa que no tiene su domicilio fiscal en ninguno de los dos domicilios que
se señalan en la colonia San Martí, en Monterrey, Nuevo León, ni en la Colonia
del Valle, Ciudad de México,
El giro
de esta empresa es la comercialización, compra, venta y distribución de
productos de aceros y metales, aluminio, cobre, bronce, plástico, cartón,
papel, todo tipo de productos de acero y todo tipo de PVC, así como todo tipo
de tubería, etc.
En marzo
del 2011, a través del Fonade, la Conade le dio a Lozano 568 mil pesos para la
compra de insumos médicos que comprobó con una factura de Grupo Comercial
Maxprise S.A. de C.V. cuyo domicilio no se localizó en Guadalupe, Nuevo León.
Dicha
empresa fue dada de baja a finales de 2010.
También
del Fodepar, la FMAA recibió 1.9 millones de pesos en septiembre de 2011 por
concepto de complementos alimenticios e insumos médicos que comprobó con
factura de Comercializadora Empresarial y Abastecedora Cadena S.A. de C.V.,
misma que también es falsa, ya que el apoderado legal de la empresa refirió
nunca haber tenido trato comercial con la FMAA.
La
factura expedida aparece como cancelada, es decir, no fue utilizada en el ejercicio fiscal.
La FMAA
recibió ese monto en su cuenta bancaria, lo transfirió a otra cuenta distinta a
la de la empresa Comercializadora Empresarial y Abastecedora Cadena que exhibe
la factura. Fue depositada en la cuenta de la empresa Sightercomercial e
Industrial, S.A. de C.V.
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