El diputado federal del
PRI por Chihuahua, Antonio Tarín -quien se escondió y durmió una noche en las
oficinas de la Cámara de Diputados para no ser detenido por las acusaciones de
corrupción en su contra- volvió a insistir este miércoles para que le otorguen
el fuero y la protección constitucional.
Tarín -sobre quien
existe una orden de aprehensión por peculado y mal uso de recursos púbicos por
alrededor de 300 millones de pesos- envió un oficio a la presidencia de la Mesa
Directiva de la Cámara de Diputados, donde se informó que la petición será
analizada y consultada con el cuerpo jurídico del Palacio Legislativo.
En el breve escrito, el
legislador priista solicitó que su caso se revise y que se determine si procede
atender su petición, ya que cuenta con un amparo y la Fiscalía no lo ha llamado
a declarar.
Argumentó que "desde
el 4 de abril presenté un escrito ante el fiscal de Chihuahua, para que me
informara si existía un procedimiento penal en mi contra, y el 5 de abril
contestó e informó que mi petición había sido enviada al Fiscal especializado
en investigación y persecución del delito”.
"La Fiscalía no ha respondido, con lo cual se acredita
que en todo momento he estado en completa disposición de acudir ante cualquier requerimiento
judicial, y a la atención de cualquier diligencia ministerial en la que se me
requiera. Sin embargo hasta la fecha no
he sido formalmente notificado de la respuesta que, en su casa, pudiera haber
recaído a la petición planteada”.
Por ello planteó que
"la Cámara debe respetar mis derechos humanos".
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