Por Niza
Rivera.
Desde
ayer en la conferencia que dio en la Universidad Iberoamericana, previo a su
Honoris Causa, José Mujica dio cátedra sobre Latinoamérica, y esta mañana en
una especie de segunda parte, retomó el tema al abrir el Encuentro
Latinoamericano “México ante los extremismos: el valor de la cultura ante el
odio” de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Durante una
hora en el Salón José María Morelos y Pavón, el expresidente uruguayo que
alguna vez fue nombrado “El mejor líder del mundo” durante su mandato, por
colocar a su nación —de 3.2 millones de habitantes— en el mapa político y
económico a nivel global, dio nueva cátedra, esta vez, bajo el tema “En defensa
de nuestros pueblos”.
Flanqueado
por Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, y Enrique Márquez,
director ejecutivo de Diplomacia Cultural, Mujica se presentó:
“Primero
que nada, tengo que agradecerles por lo mucho que nos ha dado el pueblo
mexicano, son cientos mis compatriotas que alguna vez llegaran aquí por
seguridad, por pan, por trabajo, y como nadie en América Latina este país ha
cultivado el atender a los inmigrantes y a los asilados, estableciendo un
escalón civilizatorio, muy alto, de comprensión y tolerancia en el mundo, y no
es de hoy, es de siempre, es de su historia”.
Luego
refirió sobre el capitalismo:
“La
gestación del capitalismo no es cualquier cosa, es el terremoto más grande del
sapien en la vida de la tierra, y asistimos a ello como espectadores no como
actores. Y fuimos inevitablemente arrastrados a esa ola.
Y acto
seguido dirigió unas palabras sobre parte del legado de México en el mundo:
“Si
ustedes miran el mapa de la antigua América Latina, verán que los únicos que
tienen su capital un poco al centro, se lo deben al viejo imperio azteca. El
resto de los países heredaron sus capitales en los puertos.
“Miren
Europa y van a ver a Madrid en el corazón de España, Moscú en el centro de
Rusia, Berlín en Alemania, París en Francia, solamente Inglaterra tiene su
capital en el mar. Desde el momento de nuestra independencia (en Latinoamérica)
fue más importante nuestra relación con el mundo central que entre nosotros
mismos”.
Mujica dejó
claro que esa dependencia abraza a Latinoamérica y representa un desafío, ya
que nos encontramos ante la globalización, y que mientras la economía del
patrimonio mundial podrá crecer entre 2 y 2.5% en promedio, el patrimonio de
las transnacionales está creciendo por encima del 15% anual.
“Si los
latinoamericanos no empezamos a tener conciencia de nuestra ‘pequeñez’, no nos
vamos a ubicar. ¿Por qué? Cómo compararnos con China y la India, Europa con
todo y sus contradicciones, y aún así se tiende a la unión. Puede haber Brexit,
inconformismo, es natural.
“Algunas
sociedades de izquierda piensan que debemos ser socialistas todos, no, nunca va
a haber nada mejor si estamos ‘atomizados’. ¿Cómo respetar nuestra
independencia, nuestra patria, y cómo ampararlas si no somos capaces de
conformar un paraguas de defensa común para ver nuestros intereses”?
Y para
rematar dijo:
“No puedo
pasar por México, por la Cancillería de México, y no decir esto, por las
dimensiones, por la historia de este país, por lo que le han quitado, por lo
que le han robado, por el pisoteo de nuestra historia, por las impotencias, por
una América mendicante, cenicienta, sumisa y que no tiene el coraje de darse
valor a sí misma. No importa ser de derecha, de izquierda o de centro, es que
ser de América Latina es tener la capacidad de soñar.
“El siglo
que viene nos agarrará unidos o vencidos”, finalizó ante un largo aplauso en el Salón Morelos.
El Encuentro
Latinoamericano “México ante los extremismos: el valor de la cultura ante el
odio”, continuará todo el día de hoy y mañana en la SRE.
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