Enrique Galván
Ochoa.
Es como
un encuentro de lucha libre. En una esquina, Los Intocables. Juegan su máscara
de organismos autónomos. En la otra, el gobierno de la 4T, no quiere perder su
melena de gobierno austero. Uno de Los Intocables, el Instituto Nacional Electoral,
impugnó ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación que les impongan el tope
salarial del Presidente de la República (111 mil pesos mensuales) y la
reducción de alrededor de 2 mil millones de pesos a su presupuesto para 2020.
Los otros del grupo elitista son los integrantes de la Comisión Federal de
Competencia Económica, el Instituto Federal de Telecomunicaciones y el Banco de
México. Su argumento es insostenible: dicen que el gobierno de la 4T quiere
hacerse del control de las instituciones. ¡Pero si siempre dependieron del
presidente en turno! Si fuera cierto lo que dicen, cabe la pregunta: ¿ahora por
qué tan melindrosos? La Corte turnó el expediente relativo a la demanda del INE
a la ministra Yasmín Esquivel, quien previamente negó suspensiones para
mantener los salarios de 2019 a los demás organismos independientes. La opinión
pública viene exigiendo una auditoría a fondo de los recursos que ha manejado
el INE en los últimos años. Se trata de miles de millones de pesos.
Los
megaproyectos.
¿Cuál es
el límite de las megaobras que realizan el gobierno y compañías del sector
privado? Los derechos humanos, la ecología, por supuesto. Este miércoles la
segunda sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación podría dictar sentencia
sobre un amparo que concierne a todas las personas y comunidades en México que
se ven afectadas por megaproyectos. El amparo en revisión, promovido por los
Comités de Cuenca Río Sonora, afectados por un desastre ecológico, con el
acompañamiento legal de la ONG Poder, pone en tela de juicio los artículos 31 y
34 de la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente y su
Reglamento en materia de evaluación de impacto ambiental, y cuestiona la forma
actual de hacer consultas ambientales, especialmente los procesos de consulta a
la población.
El peso
resiste al virus.
En forma
un tanto sorpresiva, ayer reaccionó nuestra moneda, luego de tres jornadas con
pérdidas y de regresar a los 19 pesos por dólar, en medio de los temores a que
un brote de coronavirus pudiera afectar el crecimiento económico mundial.
Cotizaba en 18.76 por dólar a media mañana, con una ganancia de 0.75%, frente a
los 18.90 del precio de referencia de Reuters del lunes.
Por otro
lado, el índice de la Bolsa Mexicana de Valores subía 0.97%, a 44 mil 563.56
puntos, con un volumen de 35.6 millones de títulos negociados, de acuerdo con
Reuters.
Asunto: el
Fobaproa de las Afores
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