Por Sara
Pantoja.
La jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum,
adelantó que “muy probablemente” la Ciudad de México se mantendrá en semáforo
epidemiológico naranja por sexta semana consecutiva, del 3 al 7 de agosto, y
que sólo el Poder Judicial reiniciará algunas actividades de manera presencial,
con las respectivas medidas sanitarias.
Además, informó
que el regreso a las oficinas de los servidores públicos del gobierno
capitalino — enviados a trabajar a sus casas como parte de las medidas
sanitarias–, previsto para el 10 de agosto, se pospone hasta el 1 de octubre,
como también se decidió en el gobierno federal, debido a la evolución de la
pandemia.
Ayer,
Sheinbaum precisó que el nivel de ocupación hospitalaria de pacientes con
covid-19 sigue en aumento, con un promedio de 16 ingresos diarios en los
diferentes hospitales públicos y privados, y ante tal panorama subrayó:
“Muy
probablemente se mantenga el semáforo naranja. De hecho, hay algunas
actividades que entran la próxima semana que tienen que ver con el Poder
Judicial, principalmente, con muchas medidas de seguridad y de sanidad. Y
evidentemente estamos revisando diario para poder tomar decisiones a tiempo, si
es que necesitamos revertir algunas de las actividades que están permitidas”.
Este jueves,
luego de inaugurar el Laboratorio de Innovación en Bioenergía, en la Central de
Abasto (Ceda), la jefa de gobierno se refirió al regreso de los trabajadores
de su administración a las oficinas:
“Hay
algunas actividades que tienen que abrir las alcaldías y algunas otras áreas
del gobierno –muy importantes para trámites– que se van a abrir con citas y las
medidas sanitarias necesarias, pero el mayor grupo de personas que se dedican
principalmente a labores administrativas en el gobierno de la ciudad, incluidas
las alcaldías, se pospone hasta octubre”.
Con el
Laboratorio de Innovación en Bioenergía –diseñado, construido y operado por el
Instituto Politécnico Nacional (IPN)–, en su Fase 1, se pretende aprovechar el
aceite vegetal usado en cocinas de la Ceda para generar mil 500 mil litros de
biodiesel.
Ese
combustible será usado en un inicio por 200 autobuses de la RTP del gobierno
capitalino. La intención es reducir 15% el costo de la compra de combustible.
Además, el Laboratorio producirá glicerina, y el proceso no generará residuos
ni utilizará agua y será de alta eficiencia energética.
Durante el
acto inaugural, Sheinbaum Pardo comentó que la creación de dicho Laboratorio
es “casi un tema personal”, debido a que, en su etapa de investigadora en la
Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), basó parte de su estudio en la
conversión de aceite de cocina usado en biocombustible.
Para la
construcción de la planta, el gobierno de la Ciudad de México invirtió 4
millones de pesos y la Ceda otros 500 millones de pesos. En una primera etapa,
la planta generará cuatro empleos de alta especialidad.
La
existencia de este Laboratorio convierte a la Ceda en un “Centro de Energía
Renovable”, dijo, y
recordó que en la ciudad hay otros proyectos científicos y tecnológicos, como
la instalación de techos solares, también en la Central de Abastos.
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