Verdaderamente en la bancada del PRD
en el Senado rayan en el cinismo. A pesar de que sólo les piden como cuota
partidista 15 mil 683 pesos al mes, cuando sólo de dieta perciben 117 mil 400
pesos, la gran mayoría no la pagan.
Y el colmo de lo inverosímil es que
el nuevo vicecoordinador de la bancada, el tabasqueño Fernando Mayans, es uno
de los que más debe por este concepto: adeuda a su partido 784 mil 190 pesos.
Esto significa que de los 55 meses
que lleva como senador sólo ha pagado cinco meses y ya lo nombraron
vicecoordinador de la fracción. Al menos la actual coordinadora, Dolores
Padierna, está al corriente en sus cuotas.
Raúl Morón, quien buscó la coordinación
por el grupo de senadores tránsfugas y que se mantiene en el liderazgo del
denominado bloque parlamentario, tiene una deuda de 265 mil 683 pesos.
Y Miguel Barbosa, quien era el
coordinador de la fracción y que logró mantenerlos unidos en la bancada, aunque
ha sido acusado de querer dinamitar al partido del sol azteca, está al
corriente de sus cuotas.
De acuerdo con un documento interno
del PRD de este mes, quien más debe por concepto de cuotas es Mario Delgado,
que por cierto hizo pública su renuncia al PRD en enero de 2015.
Delgado Carrillo tiene un adeudo de
862 mil 609 pesos, es decir, debe los 55 meses que ha sido senador, ya que ni
siquiera pagó cuando era integrante del PRD.
Podría calificarse de injusto
tomarle en cuenta todos los meses que debe, pero como señala Fernando
Belaunzarán, al recibir todas las prestaciones de la bancada, como el ser
presidente de la Comisión del Distrito Federal y secretario de dos comisiones,
lo cual significa 400 mil pesos más, implica que son como polizones en el PRD.
Pero ni siquiera se tenían que
esconder, ya que gozaban de todos los derechos y les correspondía pagar una
cuota, que no es de 15 por ciento como señala el artículo 200 del estatuto del
PRD, sino menor, ya que su dieta, sin contar ningún otro ingreso, es de 117 mil
400 pesos y el pago mensual de 15 mil 683.
Al igual que Mario Delgado, los
senadores Rabindranath Salazar y Zoé Robledo hicieron pública su salida del PRD
y anunciaron que participarán en Morena, el primero nunca pagó las cuotas
partidistas y el segundo quedó a deber 611 mil 688 pesos.
La gran pregunta es si estos
senadores, que no cumplieron con el estatuto de su partido, que les hace un
cobro tan nimio, estarán dispuestos a pagar lo que exige Morena en sus
estatutos, referente a sus finanzas.
En el artículo 67 señala que “Morena
se sostendrá fundamentalmente de las aportaciones de sus propios integrantes,
quienes, salvo situaciones de desempleo o pobreza extrema, los menores de edad
y los residentes en el extranjero, contribuirán con el equivalente a un peso
diario, de conformidad con el reglamento respectivo.
“En el caso de legisladores o
representantes populares electos por Morena, éstos deberán aportar el equivalente
al cincuenta por ciento de sus percepciones totales (salario, aguinaldo, bonos,
prestaciones)”.
Quizá esta sea una de las razones
por las cuales los senadores que se dicen de Morena no se han registrado en la
bancada del PT, que encabeza Manuel Bartlett, y es la que representa a Andrés
Manuel López Obrador.
En esta telenovela de absurdos y
vergüenzas falta definir cómo quedarán las comisiones y sobre todo el Instituto
Belisario Domínguez, que preside el senador Miguel Barbosa, y lo hacía en su
carácter de coordinador parlamentario del PRD.
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