Inminente desafuero de Tarek.

Alejo Sánchez Cano.

Datos del INEGI señalan que el problema de la corrupción es uno de los principales que aquejan la vida del país, sólo por debajo de la inseguridad. En ese diagnóstico, toma especial interés un asunto que actualmente se ventila en la actividad parlamentaria y tiene que ver con el fuero de los legisladores.

Y es precisamente la figura del fuero lo que está deteniendo la sanción penal que a todas luces espera al diputado federal por Veracruz, Tarek Abdalá, sobre quien pesan acusaciones por el desvío de recursos cuando fungió como titular de la Tesorería de Veracruz, en el gobierno de quien hasta hace poco permanecía como prófugo de la justicia, Javier Duarte de Ochoa.

La detención de Duarte, exgobernador de Veracruz, provocó que la Sección Instructora de la Cámara de Diputados retomara el proceso para retirar el fuero al legislador y todo indica que la decisión está tomada en el sentido de que el pleno de San Lázaro se erija en jurado de procedencia para que se declare que hay lugar a proceder en contra del inculpado, caso en el cual éste será destituido de su cargo y quedará sujeto a la jurisdicción de los tribunales competentes. En otras palabras, el desafuero de Tarek es inminente.

Hasta donde conocemos, las acusaciones que pesan sobre el legislador son por la presunta desviación de recursos destinados a educación y salud, de más de 300 millones de pesos, y por ese motivo el extesorero de la Secretaría de Finanzas y Planeación del gobierno veracruzano fue inhabilitado por 10 años para desempeñar un cargo en el servicio público en la administración estatal, sanción que fue notificada en septiembre del año pasado al exfuncionario. Desde febrero, el Poder Legislativo analiza si procede el juicio de desafuero que existe en su contra.

Las carpetas de investigación aportadas por las autoridades judiciales agotaron el tiempo de los 60 días y, después del estudio y análisis de los elementos de acusación, se espera que la sección instructora emita este jueves el dictamen respectivo para iniciar el desafuero de Tarek, y con esa acción, también conocida como juicio político, el viernes próximo los diputados cerrarán sesiones ordinarias del segundo año de ejercicio de la LXIII Legislatura.