Tras los
señalamientos que hizo el diario The Wall Street Journal sobre Alfonso Romo, de
quien dijo “hay dudas sobre su compromiso con la transparencia”, el candidato
presidencial de la coalición Juntos Haremos Historia, Andrés Manuel López
Obrador, lo calificó como un “empresario
ejemplar” y subrayó que además sería su jefe de gabinete en caso de ganar las
elecciones de julio próximo.
“Nosotros le agradecemos mucho a
Alfonso Romo, porque es un empresario que tiene dimensión cívica y social. Es
un empresario que merece todo nuestro respeto, tiene todo nuestro apoyo, nos ha
ayudado mucho, y por eso precisamente es que Televisa está atacándonos, pero es
propio de la temporada”, señaló el tabasqueño, luego de que la televisora reprodujo una nota del
periódico The Wall Street Journal.
“Claro que sí (sería mi jefe de
gabinete). Alfonso Romo es un empresario ejemplar que nosotros respetamos
mucho. Yo en lo personal le agradezco que fue de los pocos empresarios que ha
decidido apoyarnos, a pesar de la guerra sucia, y eso no le gusta a la mafia
del poder”,
puntualizó.
López
Obrador estuvo en esta ciudad para reunirse con aproximadamente 500
simpatizantes que formarán parte de su estructura de la defensa del voto.
Al finalizar
el evento, el exjefe de Gobierno de la
Ciudad de México lamentó que la empresa Televisa, que se “había portado bien”,
regresara a su estrategia de golpearlo a través de una acusación publicada
contra Romo Garza en el diario estadunidense.
“Se escudan en un periódico
extranjero que da a conocer la noticia, cuando muchas veces esos periódicos
inventan noticias. A ese periódico en particular, el Wall Street Journal, lo
tuve que demandar porque me difamó. No sólo por venir del extranjero una noticia
es veraz, y aquí lo que lamento es que Televisa, Loret de Mola, que es muy dado
a dar información que beneficia al régimen, hoy se lanzó contra Alfonso Romo”.
Luego afirmó que los empresarios deben estar
“tranquilos”, pues habrá respeto a los hombres de negocios y promoción a las
inversiones privadas de capitales nacionales y extranjeros.
Al referirse
a la organización de los comicios de julio próximo, reconoció que en las elecciones de 2012 él y su equipo fallaron en la
cobertura de las casillas, por lo que ahora se preparan para enlistar un
ejército de 600 mil representantes en unas 50 mil casillas que se instalarán en
todo el país.
De igual
manera, expuso que actualmente tiene una ventaja de 15% respecto de su más
cercano competidor, Ricardo Anaya, del PAN, PRD y Movimiento Ciudadano, y
estimó que obtendrá el triunfo con unos 30 millones de votos, muchos de los
cuales, aseguró, serán de priistas, panistas y otros partidos que buscan una
nueva opción.
“Tenemos que
ganar bien y con amplia ventaja. Como se dice en el futbol, por goleada, y como
en el beisbol, por paliza, o como en el boxeo, por nocaut, para que los
árbitros, a los que no les tenemos mucha confianza, no vayan a hacer trampas,
porque a veces hay árbitros vendidos en lo político electoral”, lanzó, y alertó
que la principal artimaña a la que pueden recurrir tanto el PRI como el PAN es
la compra del voto.
El
tabasqueño comentó que por vez primera va en primer lugar en la intención de
voto en el estado de Nuevo León (Proceso 2155), así como en Tamaulipas,
Coahuila, Chihuahua, Sonora, Baja California y Sinaloa, donde hay un
crecimiento de Morena.
“Ahora vamos
a ganar Nuevo León. El repunte aquí se debe a una serie de factores, por
ejemplo: la gente está hasta el copete de la corrupción. Otra cosa que nos
ayuda bastante es que se quitaron la máscara los independientes, porque si ese
truco hubiese funcionado, nos hubiera costado más trabajo, pero afortunadamente
se desinfló lo de los independientes”, dijo en referencia a Jaime Rodríguez
Calderín, quien pidió licencia a la gubernatura para buscar la presidencia de
México por la vía independiente.
Recordó que
en 2006 tuvo una mala experiencia como candidato presidencial en la entidad,
porque el entonces gobernador Natividad González Parás se alió con el candidato
panista Felipe Calderón Hinojosa para ayudarlo en su campaña y entregarle 300
mil votos falsos.
Finalmente,
descartó que Morena venda candidaturas en Nuevo León, y recalcó que los
aspirantes se deciden a través de encuestas, que son las que indican quién es
el más rentable en cuestión electoral.
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