El Tribunal
Supremo de Italia declaró nula la sentencia que autorizaba la extradición de
Tomás Yarrington a México –emitida en septiembre pasado por la Corte de
Apelación de Florencia–, pero dio luz
verde para que el exgobernador de Tamaulipas sea enviado a Estados Unidos.
El veredicto deja a Yarrington en el
limbo porque, ante el desconocimiento de las motivaciones detrás de la
sentencia del Tribunal Supremo —que se hará públicas en próximas semanas—, no
se sabe si el procedimiento de extradición a Estados Unidos realmente avanzará.
“El Tribunal Supremo de Italia ha
anulado la parte de la sentencia que consideraba subsistentes las condiciones
para llevar adelante la solicitud de extradición de Tomás Yarrington presentada
por el Gobierno de México”, explicaron los jueces de la Sexta Sección.
“(La razón
es que) acogiendo el recurso presentado
por la persona sujeta a la petición de extradición, (el Tribunal Supremo) ha
considerado que es necesario que la Corte de Apelación se pronuncie nuevamente
sobre algunas cuestiones planteadas por la defensa (de Yarrington)”.
Por el
contrario, precisaron, “el Tribunal
Supremo ha considerado infundada la apelación presentada contra la petición de
extradición del Gobierno de Estados Unidos”.
Después de
conocerse la decisión de los jueces de Roma, el abogado Luca Marafioti,
defensor de Yarrington, subrayó que se
trata de una victoria, aunque parcial. “La corte se ha pronunciado de esta
manera después de que hiciéramos una serie de objeciones, también en relación
con la situación de los derechos humanos en las cárceles mexicanas”,
apuntó.
Añadió: “Me siento satisfecho. En mi opinión, esto
debería dificultar también la extradición (de Yarrington) a Estados Unidos.
Pero para saberlo con precisión hay que esperar hasta que salgan las
motivaciones”.
De acuerdo
con Marafioti, “ahora hay que ser
pacientes hasta que se conozca por qué los jueces han decidido de esta manera.
Eso será lo que despeje la situación”.
En la
primera audiencia ante el Tribunal Supremo de Italia, la defensa de Yarrington
mantuvo en sus conclusiones la petición de rechazo a la extradición a Estados
Unidos o a México, e insistió en que el
veredicto de la Corte de Apelación de Florencia, que en septiembre pasado dio
su visto bueno a la extradición del exmandatario, no era válido.
Entre otras
razones, Marafioti esgrimió que, en
particular, en el caso de la solicitud de México no existe la garantía de que
los derechos humanos del exmandatario serán respetados una vez que su cliente
sea trasladado a ese país. Una circunstancia que, dijo, también suscitó la
preocupación de la Fiscalía de la Corte de Casación.
“Durante el debate, la fiscalía
manifestó que tiene grandes dudas sobre la (posible) extradición a México, a lo
que nosotros hemos insistido en que incluso una eventual extradición a Estados
Unidos es preocupante, pues no está garantizado que luego no sea enviado a
México”, sostuvo
esta mañana Marafioti en declaraciones a un pequeño grupo de periodistas para
responder a una pregunta de Apro.
Y aseguró
que la perplejidad del fiscal sustituto Paolo Canevelli se remitía a cuestiones
relacionadas con la situación de los derechos humanos en México.
Sin
periodistas.
La primera
audiencia del exgobernador ante la Corte de Casación, de hora y media de
duración, se realizó en la Sexta Sección Penal, en el segundo piso de dicho
tribunal, donde se ha debatido el expediente 53443/2017, número asignado al
caso Yarrington.
En un
mensaje escrito, remitido a Apro, la secretaría del tribunal precisó que tal
debate se llevó a cabo en la Cámara di Consiglio, una modalidad —prevista en el
ordenamiento italiano— que implica que la discusión entre la defensa y la
acusación se realice a puerta cerrada y no se permita el acceso de la prensa.
Por esta
razón, a la audiencia sólo asistieron los abogados defensores de Yarrington, el
representante de la Fiscalía y los cinco jueces que se han pronunciado sobre el
caso, además del personal encargado de la redacción de las actas.
A la sala ni
siquiera pudo ingresar Tomás Yarrington Jr, quien llegó ayer a Italia, y en las
inmediaciones externas del tribunal esperó el resultado de la audiencia, lo
mismo que el cónsul de México en Italia, Luis Anaya.
Esta nueva etapa del procedimiento
contra Yarrington se ha hecho necesaria después de que en octubre pasado su
defensa presentó un recurso contra la sentencia del Tribunal de Apelación de
Florencia, que el 21 de septiembre dio su visto bueno a la extradición a México
o a Estados Unidos, los dos Estados que reclaman al exmandatario.
Nueva
abogada.
Como lo
publicó la revista Proceso en meses anteriores, Yarrington ha redoblado esfuerzos para oponerse a su extradición, y
para ello contrató a Giulia Bongiorno, una abogada muy conocida en Italia por
defender al hoy difunto Giulio Andreotti, el controvertido ex primer ministro
italiano acusado de vínculos con la Cosa Nostra, la mafia siciliana.
En la
actualidad Bongiorno posee un bufete de abogados, “Estudio Legal Giulia
Bongiorno”, que de acuerdo con información pública se especializa en delitos
económicos y financieros y otras áreas del Derecho Penal. Además, Bongiorno ha
sido presentada como candidata del partido populista y xenófobo La Liga para
las elecciones generales que se celebrarán en Italia el próximo 4 de marzo.
De acuerdo con información obtenida
por Apro, en la apelación presentada meses atrás, la abogada insistió que los
testigos citados por las autoridades mexicanas y estadunidenses para declarar
contra Yarrington no son fiables.
Otro de sus argumentos es que no se
ha realizado una presentación adecuada de los hechos y tampoco hay pruebas que
demuestren la relación del político con cárteles mexicanos.
Dichas faltas pondrían en el debate
el “fundamento razonable”, necesario para que –según lo establecido por el
ordenamiento italiano– se proceda a la extradición de su cliente, según Bongiorno.
En
reiteradas ocasiones Proceso ha intentado contactar a la abogada, pero hasta
ahora no ha habido respuesta.
Por su
parte, Marafioti –abogado que ya encabezó la defensa de Yarrington ante el
Tribunal de Apelación de Florencia– incluyó
en sus argumentos que el político mexicano habría sido objeto de persecución
política por parte del Partido Acción Nacional (PAN), en particular durante el
gobierno de Felipe Calderón.
El objetivo:
desacreditarlo al exmandatario y
miembros del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
A este
respecto se ha señalado que, en 2009, año de la primera investigación de la
Procuraduría General de la República (PGR) contra Yarrington, más de 30
funcionarios del PRI y del Partido de la Revolución Democrática (PRD) fueron
puestos bajo investigación.
Preocupación
italiana.
Bajo estas
circunstancias, el caso Yarrington fue incluido en el último informe bianual
que realiza la Dirección de Investigación Antimafia (DIA) de Italia, un
organismo gubernamental que reúne varias fuerzas policiacas italianas y cuya
tarea es vigilar y luchar contra la mafia.
De acuerdo
con ese informe, que se remite a los primeros seis meses de 2017 —periodo en el
que fue arrestado Yarrington en Florencia—, la detención del exgobernador suscita preocupación por las
imprevisibles y desconocidas implicaciones que conlleva en la relación entre
narcotraficantes mexicanos e italianos.
“[La detención de Yarrington] debe
ser leída con atención, también en el plano de la evolución de las relaciones
con los narcotraficantes”, se lee en dicho informe.
Añade: “Una posible alianza entre ‘ndranghetisti
(miembros de la mafia calabresa de la Ndrangheta) y narcotraficantes, también
en vista de una futura estrategia de contraste, no puede ser descuidada”.
Además, la DIA recuerda la acusación de presuntos
nexos de Yarrington con Los Zetas y el cártel del Golfo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario.