Por Sara
Pantoja.
Entre 25
y 30 inmuebles comerciales, públicos e históricos, fueron dañados por
encapuchados al margen de la marcha por los cinco años de la desaparición de
los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Los
sujetos vandalizaron la puerta Mariana de Palacio Nacional, el edificio del
Banco de México y una librería, entre otros inmuebles, además de hacer pintas
en el recorrido.
Alrededor
de 30 policías protegidos con cascos y escudos se apostaron en el Eje Central,
a la altura de la avenida Juárez, pero no realizaron acción alguna.
Al avance de
los agresores encapuchados, los uniformados caminaron sobre la calle Madero y,
al llegar al Zócalo capitalino, realizaron una formación a modo de presencia,
pero no detuvieron a una sola persona.
El gobierno
capitalino reprobó los daños a inmuebles y comercios, y dijo que realiza las
investigaciones para determinar responsabilidades.
“Esta
ciudad se ha caracterizado por tener movilizaciones pacíficas, por ello
reprobamos los destrozos a comercios y vía publica de un grupo minoritario que
no representa al movimiento, el cual públicamente condenó y se deslindó de la
violencia”,
puntualizó en un comunicado.
El gobierno
de Claudia Sheinbaum informó que durante la marcha “un grupo de menos de 100
personas encapuchadas se mezcló con transeúntes y participantes de dicha
manifestación, al tiempo que realizaron destrozos en comercios y vía pública”.
Ante esta
situación, agregó, elementos de la Unidad Táctica de Auxilio a la Población
(UTAP), de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), se acercaron “para
evitar mayores daños y proteger a la ciudadanía”.
La
mandataria capitalina recordó que la Ciudad de México “se ha caracterizado por
tener movilizaciones pacíficas”, por ello, reprobó los daños y dijo que la SSC
y la Procuraduría General de Justicia local (PGJCDMX) ya realizan las
investigaciones correspondientes.
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