Justicia al estilo Porky / Nuevos consejeros del INE / Frontera norte.

Redacción / Sin Embargo.

La resolución del juez Anuar González Hemadi de conceder un amparo y ordenar la liberación inmediata de Diego Cruz, uno de llamados Porkys, acusado de abusar sexualmente de Daphne N. en Veracruz, ha sido duramente criticada por la manera en que se percibe la violación de mujeres. A propósito, en La Jornada, el periodista Julio Hernández López, escribe que: “Anuar González Hemadi, emitió una resolución que constituye una pieza memorable de pornografía judicial, de virtual incitación al delito sexual contra menores de edad y personas en general. Bajo un denso tufo de actuar a partir de estímulos económicos o por presiones superiores (así ha sucedido en múltiples casos, y en el de los jóvenes apodados los Porkys siempre ha habido una combinación de clasismo, capacidad económica e influencias políticas), dicho juez de distrito consideró que no se demostró fehacientemente la comisión de delitos contra una joven víctima de abusos sexuales. Con razonamientos retorcidos y francamente irritantes, González Hemadi ha pretendido establecer que tocamientos y ciertas acciones físicas en áreas genitales no necesariamente constituyen actos lascivos ni significan una agresión sexual, así que abrió el camino hacia la libertad del joven Diego Cruz Alonso, quien había sido detenido en España y luego fue extraditado a México”.

La decisión de conceder el amparo a uno de los presuntos agresores de Daphne, podría tener consecuencias importantes para el juez, pues en Milenio, el periodista Carlos Marín, escribe que: “nada tan complicado y riesgoso como interpretar intenciones, pero con frecuencia eso se impone en los tribunales al tratar de impartir justicia. En los casos de real o supuesto abuso sexual, por ejemplo, los tocamientos a niños, niñas, mujeres […] si se aplican en partes íntimas, se pueden o no juzgar por la intencionalidad de quien los comete: no es lo mismo un miserable ‘arrimón’ en los autobuses o en el Metro que pegar todo el cuerpo contra otro por alguna frenada súbita. Para el juez tercero de distrito en Veracruz (Anuar González Hemadi), interpretar las motivaciones de probables delincuentes sexuales es tan sencillo como que le concedió el amparo de la justicia federal a uno de los llamados porkys de Veracruz del caso Daphne, dizque porque no se comprobó si ese acusado tuvo una ‘intención lasciva’ cuando le metió la mano (en pandilla: junto con otros tres amigos pederastas) a su víctima. Pocas veces el Consejo de la Judicatura Federal ha quedado tan expuesto al escrutinio público. Más vale que hoy mismo se deshaga de tan inexplicable ‘juez'”.

También, Excélsior dedica su columna de trascendidos, Frentes Políticos, a la controvertida resolución del juez González Hemadi y a las críticas y protestas que no se hicieron esperar: “no es para menos. En la CdMx, un grupo de alrededor de 40 personas, en su mayoría mujeres, se manifestó en la representación del estado de Veracruz luego de que el juez Anuar González Hemadi absolvió a Diego Cruz Alonso, uno de los Porkys de la Costa de Oro, acusado de violar a una menor de edad. Sus argumentos fueron calificados como “abominables” por Javier Fernández, padre de la menor. Y es cierto, basta revisar los fundamentos del juez para darse cuenta de que ninguna mujer está a salvo. El ahora llamado Juez Porky representa la podredumbre del sistema de justicia. Si el Consejo de la Judicatura no llama a cuentas a González Hemadi, se confirmaría que el sistema sí está podrido hasta la médula. Y no, ¿verdad?”

A propósito del caso, en Milenio, su columna de trascendidos Trascendió, asegura que: “el amparo otorgado a Diego Gabriel Cruz Alonso, uno de los cuatro Porkys acusados de violación de la menor Daphne N. en Veracruz, encendió los focos rojos en el Poder Judicial de la Federación, debido al escándalo que ha generado a escala internacional la noticia de que el joven está a punto de ser liberado. Por esa razón, el Pleno del Consejo de la Judicatura Federal sesionará hoy para revisar el fallo de Anuar González Hemadi, juez Tercero de Distrito en aquella entidad, quien ordenó dejar sin efecto el auto de formal prisión dictado contra el señalado el pasado 23 de enero, porque, según él, no se configura el delito de pederastia”.

El periodista Carlos Puig, igualmente reflexiona sobre la justicia mexicana ante la violación  y escribe en Milenio: “vivo en un país en el que un juez, de nombre Anuar González Hemadi, está convencido de que tocar a una mujer en los senos sin su consentimiento mientras otros le meten los dedos a la vagina, sin que ella lo quiera, no es un abuso sexual. Vivo en un país en el que un juez, de nombre Anuar González Hemadi, piensa que si uno no dice abiertamente que quiere copular, puede seguir tocándole los senos a esa mujer mientras sus amigos le meten los dedos en la vagina. No hay delito. Sí. En ese país vivo. Vivo en un país en el que un juez, […] piensa que manosear a una menor de edad en un coche contra su voluntad es una forma de diversión. Vivo en un país en el que un juez, de nombre Anuar González Hemadi, piensa que meter los dedos en la vagina de una menor de edad, tocarle los senos, cuando ella pide que no se haga, no es delito, porque lo que importa es si el hombre se excita, si no, no. Cito el juez, de nombre Anuar González Hemadi, quien después de dar por buenos los hechos, dice: ‘Esto es, tales elementos convictivos dan noticia de las circunstancias de tiempo, modo y lugar, de cómo fue que tuvo lugar el tocamiento (elemento objetivo del abuso), empero, no dan información de la lascividad de la conducta (elemento subjetivo del abuso), y que es parte integrante del delito de pederastía como parte conformadora del denominado ‘abuso sexual’. Es decir, sólo se da noticia de un hecho de tipo sexual (por la parte del cuerpo) en donde existió el tocamiento, pero no se aprecia esa intención de satisfacer placeres sexuales o el erotismo propio del activo, o de un apetito carnal inmoderado, pues es un hecho que se dio instantáneo, en un solo momento, sin expresar palabra y sin que se tuviera ese deseo de deleite sexual en detrimento de la víctima…’. Vivo en un país en el que un juez, de nombre Anuar González Hemadi, piensa que no hay abuso sexual si el abusador no grita que le está gustando muchísimo y, de preferencia, sostiene una erección. En ese país vivo. El mismo en el que vive ese juez. A chingarse”.

La impunidad ha sido un sello en el estado de Veracruz, así lo asevera en Milenio, el periodista Jairo Calixto Albarrán, quien señala que: “hay muchas razones para pensar que en Veracruz sigue Gobernando Javier Duarte. En primera porque nomás no lo han apañado […]; en segundo, porque las condiciones de inseguridad en el estado […] se han puesto peor que antes. En tercero, porque la lógica Porky de la impunidad prevalece y campea como los cárteles del crimen organizado. De ahí que lo más lógico sea que […] el titular del Juzgado Tercero de Distrito del Estado de Veracruz,[…] determinó un amparo para Diego Gabriel ‘N’, miembro activo de Los Porkys de la Costa de Oro, pues en medio de la violación de Daphne, cuando mucho participó con un ‘roce incidental’ que no entra en la categoría de lo lascivamente deliberado en la satisfacción de ‘un deseo sexual a costa del sujeto pasivo’. Al parecer el toqueteo no consensuado de senos, nalgas y vagina no está mal visto […]. Yo digo que con este nivel de arcaico pero decimononico espíritu de las leyes deberíamos dejar de perder el tiempo con supuestas preocupaciones sobre los derechos humanos, los temas de género y la lucha por la justicia, y ya declarar a la violación como un derecho de cualquiera que se acredite como Porky original, con voluntad de serlo o simple admirador de esa regocijante piara de puercos triple X […]. Es que en estas cosas del debido proceso y las hilachas, que sirven más a los ojetes que a las víctimas”.

Nuevos consejeros del INE.

Ante la expectativa de saber los nombres de los consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE), en el diario Reforma, su columna de trascendidos Templo Mayor, asegura que: “no se lo digan a nadie, pero hoy se espera humo blanco en San Lázaro en la designación de los tres nuevos consejeros del INE. Y no es por fomentar la ludopatía, pero si quiere apostar sobre seguro todo apunta a que los ganadores serán Flavio Galván (con el apoyo del PRI), Carla Humphrey (PAN y PRI) y Beatriz Zavala (impulsada por el PRD). ¡Qué sorpresiva selección!, dijo nunca nadie”.

Frontera norte.

En el Reforma, el académico, columnista y politólogo, Sergio Aguayo, escribe que: “El gigantesco lindero con Estados Unidos está en remodelación. […]. Nos acostumbramos a las fronteras abiertas. […]. La metamorfosis empezó en la década de los años noventa del siglo XX. […] Simultáneamente, se constituyó una gran coalición binacional para firmar un Tratado de Libre Comercio que modificó de raíz la tesis oficial sobre el papel de Estados Unidos; la vecindad dejó de ser una amenaza para convertirse en oportunidad. […]. Hace unos días el corresponsal de ‘Reforma’ en Washington, José Díaz Briseño, detalló los requerimientos puestos por Washington a las empresas que quieran hacer propuestas arquitectónicas. El muro que se verá desde México debe imponer respeto […]. La muralla se completa con un incremento de 25 por ciento en el número de vigilantes. El gobierno de Trump asignará fondos para contratar en los próximos años a 15 mil agentes adicionales para la Patrulla Fronteriza y de inmigración. De mantenerse las proporciones actuales, 86 por ciento de los efectivos de estas corporaciones estarán desplegados en la frontera común, 10 en los linderos con Canadá y el resto en las costas. A Washington no le importa la basura que nos avienta. El producto más nocivo: las armas. […]. En verdad es notable la falta de interés del gobierno mexicano por lo que pasa en la frontera. Es ridículo que la Administración General de Aduanas tenga sólo tres mil 267 agentes para un país con 15,423 kilómetros de fronteras marítimas y terrestres. Si a eso añadimos la histórica corrupción aduanera […] se entiende que la presencia oficial sea testimonial y etérea, como si fuera de algodón. Es una indiferencia irresponsable si se recuerda que tenemos diez años de guerra y que debería ser prioritario obstruir las arterias por donde recibe su armamento el crimen organizado. […]. Cuando se rediseñe el nuevo proyecto de país, un requisito indispensable será recuperar el control de las fronteras. En la que da a Estados Unidos, ¿cómo deberá ser la muralla capaz de frenar ese contrabando de armas que prolonga la violencia y eleva el costo en sufrimiento y vidas en México?”