Empleados regionales del Sistema de
Administración Tributaria (SAT) que ayer fueron despedidos de forma masiva,
tomaron desde muy temprano las instalaciones del inmueble tributario en la
ciudad de Tuxpan, al norte de Veracruz.
Exigen la
presencia del presidente Andrés Manuel López Obrador o de uno de sus
secretarios de despacho más cercano.
Con cartulinas en las que reprueban
la Cuarta Transformación y el “cumplimiento de sus promesas de campaña”, los
exempleados regionales del SAT fustigaron que 300 familias al norte de Veracruz
se han quedado sin el sustento de un empleo fijo.
Los
exempleados federales dijeron a reporteros
locales que al día 20 ni siquiera han recibido el pago del aguinaldo, prima
vacacional y bono, razón por la que el despido masivo del jueves fue a todas
luces arbitrario.
“No vamos a dejar entrar a nadie a esta
oficina hasta que seamos escuchados”, reprocharon.
Ayer, representantes del SAT en la Ciudad de
México dieron por concluidas labores en sus oficinas regionales de Tuxpan,
Córdoba y Poza Rica y se espera que en próximos días suceda lo mismo en otros
inmuebles tributarios del estado.
La medida radical fue atribuida
-según los enviados de la Ciudad de México- a “ajustes y reducciones
presupuestales” de
la nueva administración de Andrés Manuel López Obrador.
En el caso
de Tuxpan, la presión sobre los empleados fue más radical, pues se les exigió
firmar su renuncia o no se les permitiría salir de la oficina, según un reporte
de Mega-noticias, televisora por cable con oficinas en el norte de Veracruz.
Los trabajadores despedidos son del
área de auditoría, recaudación, jurídico y personal del servicio.
Los enviados del gobierno federal les
informaron que estaban despedidos, obligándolos a rubricar su renuncia, o en su
defecto -les dijeron- ser “cesados” por la pérdida de una plaza.
Hasta el
momento el Sistema de Administración Tributaria (SAT) no ha hecho ningún
pronunciamiento público.
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