Enrique Peña Nieto explicó el jueves pasado a qué se debe el
aumento en el precio de la gasolina en México. ¿Pero qué tanto de lo que dijo
es falso, engañoso o verdadero?
El Sabueso revisó
cinco frases del mensaje de Peña Nieto y encontró más mentiras y datos
manipulados que verdades.
UNO
Frase: Lo primero que
hicimos antes de tomar esta medida fue recortar el gasto del propio Gobierno de
la República en casi 190 mil millones de pesos.
Calificación: Falso
En los últimos dos
años el gobierno federal ha prometido recortar el gasto público. En realidad,
ha gastado de más, según los mismos datos de la Secretaría de Hacienda. El
recorte del que habla Peña Nieto es ridículo.
Tan sólo en 2015, por ejemplo, el secretario de Hacienda
—Luis Videgaray, ahora Canciller— anunció un ajuste al gasto por 52 mil
millones de pesos. Las cifras de la Cuenta Pública indican que el gobierno federal terminó gastando 185.8
mil millones más de lo presupuestado.
Sólo ese gasto extra de 2015 equivale al supuesto recorte
del que habló Peña Nieto en su mensaje de Año Nuevo del jueves pasado.
Pero el malgasto ha
continuado: sólo de enero a septiembre de 2016 el gobierno federal ya había
gastado 174 mil 507 millones de pesos más, en comparación con el presupuesto
que le asignó la Cámara de Diputados.
Será hasta abril próximo que se dé a conocer el gasto total
de 2016, pero los informes trimestrales
de la Secretaría de Hacienda indican que en el periodo enero-septiembre es
Presidencia de la República la instancia que, en términos proporcionales,
aumentó más su gasto: 63%.
DOS
Frase: Tan sólo en el
sexenio anterior se perdieron casi un billón de pesos, es decir un millón de
millones, subsidiando la gasolina.
Calificación:
Engañoso.
En el periodo 2006-2012 el subsidio a los combustibles
ascendió a 812 mil 273 millones de pesos.
Destacan 2008 y 2012
como los años con el subsidio mayor: 481 mil 872 millones sólo en esos dos
años, es decir, 59% del subsidio de todo el periodo.
Pero lo que el
gobierno federal omite es que no sólo en el sexenio anterior hubo subsidio. En
los dos primeros años del gobierno de Peña Nieto también se subsidió el
combustible y hubo una pérdida en las finanzas de 142 mil 973 millones de
pesos.
Ese monto es 168% superior al subsidio que el Congreso
aprobó para otorgar en 2013 y 2014.
TRES.
Frase: A la fecha,
hemos tenido que eliminar alrededor de 20 mil plazas laborales, lo que
representa una reducción en sueldos y prestaciones de más de 7 mil 700 millones
de pesos.
Calificación: Falso
La partida “servicios
personales”, que incluye sueldos y prestaciones de toda la Administración
Pública Federal, ha aumentado año con año durante la gestión de Peña Nieto.
De 2012 a 2015 el
incremento fue de 7% aun
considerando la inflación, según los datos de la Cuenta Pública.
Aunque todavía no hay datos disponibles de cuánto se gastó
durante todo 2016, hasta noviembre se
habían pagado 944 mil 641.6 millones de pesos. Ese monto es superior por 24 mil
235 millones de pesos a lo que se pagó en el mismo periodo del año anterior.
CUATRO.
Frase: Mantener
precios artificiales de la gasolina significaría quitarles recursos a los
mexicanos más pobres para dárselos a los que más tienen.
Calificación:
Verdadero
El subsidio a los combustibles beneficia a los que consumen más
gasolina, que son el grupo de mayores ingresos del país.
Después de que 2012 fue uno de los años con el subsidio más
alto, los datos de Hacienda sobre cómo se distribuyó el consumo de combustible
muestran que por cada peso que recibió una persona que es parte del 10% con menores
ingresos en México, un individuo del 10% más rico se benefició con 32 pesos.
Una relación 1 peso para el más pobre contra 32 pesos para
el más rico.
El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO)
desarrolló una herramienta que muestra quiénes son los beneficiarios de los
subsidios del gobierno federal, entre ellos el de la gasolina.
CINCO.
Frase: “Es importante
subrayar que este ajuste en el precio de la gasolina no se debe a la Reforma
Energética ni tampoco a un aumento en los impuestos”
Calificación:
Engañoso
La ruta para la
liberalización del precio de la gasolina quedó establecida en la Ley de
Hidrocarburos publicada el 11 de agosto de 2014 en el Diario Oficial de la
Federación.
La Ley de Hidrocarburos es una legislación secundaria o
complementaria de la Reforma Energética que se aprobó en diciembre de 2013 para
permitir, por primera vez en 75 años, la entrada de capital privado al sector
energético.
La Ley de
Hidrocarburos señala en el artículo Décimo Cuarto Transitorio que los precios
de la gasolina y el diésel se determinarán por las condiciones del mercado a
partir del 1 de enero de 2018.
El ajuste en los precios, según cómo establecía la ley
secundaria de la reforma energética, debía aplicarse en 2018. Sin embargo, en noviembre de 2016, el
Congreso aprobó adelantar la liberalización de precios para el 1 de enero de
este año.
La frase es engañosa,
pues si bien no se cumplieron con los plazos de la reforma energética, la ruta
para la liberalización de precios se diseñó a en la legislación secundaria.
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