Enrique
Galván Ochoa.
Cuando López
Obrador desafía al Fondo Monetario Internacional (FMI) y le advierte que ya no
va a decidir la agenda de México, seguramente lo hace teniendo en mente que su
gobierno este año está abonando alrededor de 50 mil millones de pesos a la
deuda del fraude conocido como rescate bancario. Una paradoja: escribió un
libro en que desmenuza el esquema que le está costando a México 120 mil
millones de dólares y que probablemente no terminará de pagar el país lo que
resta del siglo, y tiene que pagar. Como dice Andrés Manuel, eso calienta. Por
quinta vez en los pasdos 12 meses, el FMI bajó sus expectativas de crecimiento
económico para México ante un panorama permeado por una debilidad en la inversión,
dice. El fondo prevé que el PIB crecerá 0.9% en 2019, comparado con el 1.6% que
pronosticó en abril pasado, y desde el 2.0% que estimó en 2018. De acertar con
su estimación, el PIB mexicano registrará la menor expansión económica en nueve
años. En su evaluación del país, el FMI dijo que la inversión sigue siendo
débil y que el consumo privado se ha desacelerado como resultado de la
incertidumbre en torno a políticas, el deterioro de la confianza y el aumento
de los costos de endeudamiento. Sin embargo, no menciona que desde que el
Fobaproa se echó a andar, en el gobierno de Zedillo, con el apoyo del PAN y la
oposición de López Obrador, se hizo la advertencia de que eso sucedería:
vendrían muchos años de penuria económica porque estaba fuera de sus posibilidades
asumir tamaña deuda a menos de que se sometiera a la población a un descomunal
sacrificio. López Obrador dijo que organismos como el FMI deberían ofrecer
disculpas a México.
Usureros.
¿En qué
nivel los intereses de los bancos comienzan a ser usureros, en términos del
CAT, el costo anual total? ¿50 por ciento, 70 por ciento, más de 100 por
ciento? Esos porcentajes son los que regularmente cobran en algunos de sus
productos. La primera sala de la Suprema Corte de Justicia determinó que está
prohibido el cobro de intereses excesivos o desproporcionados pactados en un
pagaré, sin importar si se trata de intereses ordinarios o moratorios, ya que
en ambos casos se configura la usura. Una deuda puede crecer al doble si el
cliente es obligado a pagar moratorios. La Corte explicó que de acuerdo con la
Convención Americana de Derechos Humanos, la usura es entendida como una
explotación del hombre por el hombre y se presenta cuando una persona obtiene
en provecho propio y de modo abusivo, sobre la propiedad de otro, un interés
excesivo derivado de un préstamo.Excelente jurisprudencia la que sentó la
Corte, veremos cómo se aplica a casos concretos, cuando los jueces tengan
enfrente un buen fajo de billetes.
¡Uy, qué
mello!
Original
pero inocua la denuncia que presentó la procuradora de justicia de la Ciudad de
México, Ernestina Godoy, contra la administración de Miguel Ángel Mancera y
José Ramón Amieva por maquillar las cifras del crimen. Presentaron un rostro
más bonito que el real. Eso ya se sabía desde que Mancera negó que las mafias
tuvieran presencia en la capital. Sin embargo, hay irregularidades más graves
que no deberían soslayarse y van más alla del maquillaje, entre ellas el manejo
de recursos para los damnificados. ¿Eso no amerita denuncia penal?
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