Por
Redacción / Sin Embargo.
Durante
la primera quincena de julio el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC)
presentó una inflación anual del 3.84 por ciento, el menor dato para este
periodo desde 2017.
Aunque el
dato se mantuvo dentro de la meta del Banco de México, del 3 por ciento +/-,
fue 0.27 puntos porcentuales superior al de la quincena inmediata anterior, de
acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía
(Inegi).
En cuanto a
los precios de la canasta básica se registró un aumento del 0.15 por ciento
quincenal, una tasa anual de 2.99 por ciento, frente a los datos de 2018,
cuando las variaciones fueron de 0.28 y de 7.28 por ciento, respectivamente.
La
analista de Banco Base, Gabriela Siller pronosticó que se colocaría en una tasa
interanual de 3.87 por ciento, un descenso desde 3.89 en la segunda quincena de
junio. Por su parte, el sub gobernador del Banco de México, Jonathan Heath,
explicó que aunque la inflación subyacente se ubicó los primeros quince días de
julio por arriba de su nivel anual (del 3.64 al 3.81 por ciento), esta caída se
explica por un descenso pronunciado en la no subyacente, que es “el componente
menos estable” del
INPC.
El
economista destacó el dato de la inflación general se anticipaba en 0.26 por ciento,
y la de la subyacente en 0.16 puntos porcentuales. Es decir, ambas predicciones
se quedaron cortas al resultado final.
En
comparación anual, es
decir la misma quincena de 2018, el INPC presentó una inflación del 4.85 por
ciento anual, un aumento del 0.32 por ciento quincenal.
Julio
Santaella, titular del Inegi explicó que al comparar las variaciones de
precios durante la primera quincena de julio en 2018 y 2019, se observó un
marcado descenso del INPC de poco más de 1 punto porcentual, del 4.85 en 2018
al 3.84 por ciento este año.
El
índice de precios subyacente registró un incremento de 0.17 por ciento
quincenal y de 3.81 por ciento anual. El índice de precios no subyacente subió 0.60 por ciento
los primeros 15 días de julio y 3.92 por ciento a tasa anual.
En el
periodo de observaron alzas en los precios de las mercancías y de los
servicios, de 0.07 y 0.27 por ciento, respectivamente, dentro del índice de
precios subyacente.
En el INPC
no subyacente, los precios de los productos agropecuarios subieron 1.15 por
ciento y los de los energéticos y tarifas autorizadas por el Gobierno 0.18 por
ciento quincenal.
PRODUCTOS Y
ESTADOS.
Los
productos que registraron el mayor incremento fueron: cebolla (13.92 por
ciento), naranja (10.16 por ciento), transporte aéreo (9.26 por ciento),
lechuga y col (7.53), papa y tubérculos (6.54 por ciento) y aguacate (4.64 por
ciento).
Los que
registraron un disminución durante la primera quincena de junio fueron: uva
(-19.23 por ciento), chayote (-13.39 por ciento), jitomate (-5.74 por ciento),
tomate verde (-3.06 por ciento), cremas para la piel (-2.16 por ciento),
juguetes y juegos de mesa (-2.03 por ciento) y huevo (-1.07 por ciento).
Las
localidades con la con la mayor variación del INPC durante mayo de 2019, y
arriba de la media nacional, fueron Tehuantepec, Oaxaca, (0.79); Oaxaca, Oaxaca
(0.63); Villahermosa, Tabasco con 0.57; Tampico, Tamaulipas, (0.56);
Aguascalientes, Aguascalientes (0.55).
En tanto que
las cinco comunidades con datos menores a la media nacional del INPC fueron
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas con -0.20 abajo; Tulancingo, Hidalgo (-0.16);
Querétaro, Querétaro (-0.07); Toluca, Estado de México (-0.01); Esperanza,
Sonora (-0.01).
Ayer, el
Fondo Monetario Internacional recortó su perspectiva de crecimiento para México
hasta el 0.9 por ciento desde el 1.6 que planteó solo tres meses antes, en
abril.
La
decisión del FMI afectó al tipo de cambio que se colocó hasta en los 19.17
pesos por dólar.
Para obtener
le INPC se toman en cuenta 159 mil 500 precios quincenalmente agrupados en 299
conceptos de consumo genéricos, los cuales abarcan 91 ramas de actividad
económica.
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