Por Milton
Martínez.
Un grupo de 52 maestros sonorenses
que fueron desalojados de sus aulas con la ayuda de la policía estatal por
oponerse a la evaluación exigida por la reforma educativa instaló un plantón
permanente en las escalinatas principales que conducen al Congreso local para
exigir su reinstalación y el pago de salarios caídos de casi tres años desde
que iniciaron su lucha magisterial.
Los docentes en el plantón sostienen
que, de no haberse negado a la evaluación ordenada por la reforma educativa, la
enseñanza en México se habría privatizado, acabado con la enseñanza pública.
Este
miércoles 30, los docentes cumplen 24
horas apostados en el palacio legislativo sonorense, a fin de sensibilizar a
los legisladores locales que pueden amortizar esta causa en tanto la federación
ordena la reinstalación y el pago de salarios caídos, así como apelar a la
voluntad política de la gobernadora Claudia Artemiza Pavlovich Arellano para
volver a esta cincuentena de maestros a las aulas.
La maestra
cesada, Marcela Zazueta, señaló que
desde de abril de 2016, cuando fue retirada por la fuerza del salón de clases
donde impartía clases, los problemas financieros de los despedidos han ido en
aumento.
“Estamos sufriendo embargo de bienes,
nos quieren quitar las casas donde vivimos por falta de pago y hemos llegado a
un límite porque nuestra situación económica se desbordó”, externó la maestra.
El pasado 12
de diciembre, el presidente Andrés Manuel López Obrador firmó la iniciativa
para cancelar, abrogar y sustituir el marco jurídico de la reforma educativa.
Luego de
signar el documento enviado a la Cámara de Diputados para su análisis, el
mandatario prometió que no se le volvería a faltar el respeto a los maestros de
México “al magisterio nacional, a maestras y maestros como sucedió
recientemente que se dedicaron a ofender a los profesores; eso se termina”.
Desde aquel mensaje presidencial
emitido en Palacio Nacional ha transcurrido un mes, dos semanas y cuatro días,
cuando a los maestros se les prometió su pronta reinstalación y pagos
atrasados, pero no han tenido avance.
La desesperación se apoderó de los
docentes debido a las exigencias familiares de las fiestas decembrinas y porque
en estados como Sinaloa y Durango los diputados locales de aquellas entidades
gestionaron recursos para los docentes que fueron cesados durante la
implementación de la reforma educativa, mientras que en Sonora los legisladores
locales no procedieron de dicha forma.
Ante esta
situación, la maestra Zazueta y el grupo
de maestros cesados que la acompañan determinaron llevar su protesta a las
escalinatas del Congreso local hasta tener una respuesta de los diputados
locales o de las gestiones que paralelamente realiza la sonorense Ana Gabriela
Guevara, actual directora de la Comisión nacional del Deporte (Conade), quien
conoce la desesperación de los docentes.
“Nosotros nos programamos para
diciembre (por la reinstalación), después nos dijeron que para la segunda
semana de enero y no ha pasado nada, por eso nuestra desesperación”, admitió la docente.
Previamente,
el secretario de Educación Pública,
Esteban Moctezuma, aseguró que los profesores cesados serían reinstalados, pero
el cumplimiento de dicha promesa no ha ocurrido.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario.