Georgina
Morett.
El presidente Andrés Manuel López
Obrador advirtió a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación que
si actúan sin razón “se van a debilitar mucho, como organización, yo conozco de
eso, las intransigencias no son opción, no son alternativa, no tienen que ver
con la izquierda”.
Y es cierto, porque el plantón de
casi 50 días de López Obrador en Paseo de la Reforma después de la elección de
2006, no sólo le costó al PRD, que en ese tiempo era su partido, 25 millones
134 mil 634 pesos para pagar facturas de gastos de insumos y logística, sino
que también tuvo un fuerte costo político.
En 2012, cuando López Obrador buscó la Presidencia
por segunda ocasión, en una entrevista con la periodista Diana Cardozo señaló:
“Pagamos un precio altísimo porque nuestros adversarios utilizaron esto como
una campaña terrible de desprestigio, y no nos ha dado tiempo de explicar que
fue un acto de absoluta responsabilidad”.
Y justificó que tenía elementos
suficientes para saber que si no iniciaban el plantón, el movimiento se
desbordaría, lo que iba a provocar violencia y muchos muertos.
Es cierto que el plantón de Reforma
provocó mucha molestia en la población y sobre todo entre los empresarios y
trabajadores, ya que a tan sólo 16 días de haberse iniciado, se registraban
pérdidas de cerca de 3 mil millones de pesos para varios comercios, hoteles y
restaurantes, así como el despido de 809 empleados registrados ante el
Instituto Mexicano del Seguro Social, según la iniciativa privada.
Pero en definitiva esta no es la
situación de la CNTE, ya que desde 1989 se habla de pérdidas millonarias por
las marchas mítines y plantones, sin que siquiera se inquieten por esta razón;
es más, podemos decir que con el actual gobierno lograron una de sus
principales demandas: la derogación de la reforma educativa que se aprobó en el
sexenio pasado.
El
Presidente de la República advirtió a la
CNTE en su conferencia mañanera que su radicalismo tiene que ver con el
conservadurismo, es cuando los extremos se tocan y está más bien relacionado
con la extrema derecha, es un conservadurismo disfrazado de radicalismo, pero
eso no prospera”.
También dejó claro que su gobierno no está en
contra del pueblo ni es represor y que no dará la orden de reprimir al pueblo y
que no lo hace por debilidad, sino que se apoyará en “la fuerza de la opinión
pública”.
Sin duda la
opinión pública en contra del plantón en Paseo de la Reforma tuvo algún impacto
el elección de 2012, pero es muy difícil que esto repercuta en la CNTE, ya que
finalmente este grupo que nació en 1979 e inició una fuerte actividad política
de marchas, mítines y plantones a partir de 1989, no busca el voto popular y
por lo tanto no le interesa la opinión pública ni las pérdidas económicas que
puedan traer sus acciones.
De acuerdo
con la Concamin los bloqueos en las vías férreas en Michoacán generan pérdidas
diarias de mil millones de pesos, cifra que se envió en estos días al gobierno
de Michoacán para pagar la deuda con los maestros de acuerdo con la información
dada a conocer por el Presidente de la República.
Ahora los maestros de Michoacán piden
cinco mil millones de pesos, pero lo de menos son estas cifras, el problema es
que desde que inició la descentralización educativa los estados más pobres del
país tienen cada vez más dificultades para atender las demandas de los
mentores.
Pero en este
plantón no podemos olvidar el contexto político actual en plena negociación de
la contrarreforma educativa y el resurgimiento de la maestra Elba Esther
Gordillo, cuando tanto la CNTE como el SNTE apoyaron a Morena.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario.