De por sí el PRI en
la capital va a la deriva, no llega ni al 10% de la intención de voto –en la
elección de la Constituyente el año pasado solo obtuvo el 7.7%- y ahora la
grilla está desatada.
El río revuelto permitió, por ejemplo, que la semana pasada,
la diputada Cinthya López Castro buscara aprovechar el vacío y se destapara para
dirigir lo que queda del PRI local, donde el periodo formal de Mariana Moguel,
ya concluyó. Lo hizo en su informe, frente al dirigente del tricolor Enrique
Ochoa. Pero su intentona quedó en el aire, pues nadie en el priismo capitalino
le hizo segunda.
La soledad de la diputada quedó exhibida, de nuevo, un día
después, cuando se confrontó en público con el diputado de su partido, Adrián
Rubalcava, durante la comparecencia del jefe delegacional en la Cuauhtémoc
Ricardo Monreal.
López –diputada por
esa demarcación- trató de reventar la reunión abriéndole la puerta a vecinos
que gritaban consignas al delegado, y acusó a Rubalcava, presidente de la
comisión de Administración Pública, de negarle el uso de la palabra, lo que
nunca ocurrió según se observa en el video de la sesión.
La legisladora se levantó a media comparecencia y comenzó a
gritar. “Un diputado de mi partido, me niega el uso de la palabra”, repetía.
López no solo abrió un frente con el ex delegado en Cuajimalpa, sino que tachó
de corruptos a sus propios compañeros de partido, diputados y jefes
delegacionales, y los acusó de hacer acuerdos en lo oscurito.
Rubalcava reviró y
anunció que solicitaría la expulsión de la diputada del PRI. Un día después,
los diputados priistas en la ALDF –menos López Castro, claro- y el delegado de
Cuajimalpa Miguel Ángel Salazar, acudieron a la convocatoria del jefe
delegacional en La Magdalena Contreras Fernando Mercado, para cerrar filas. El
mensaje fue claro: la diputada está sola. No solo por el insulto a Rubalcava,
sino porque de paso agredió al resto.
Se antoja difícil que
López, que presume el apoyo de Los Pinos, sea expulsada del PRI, pero es
innegable que ha quedado anulada e imposibilitada para dirigir el partido.
El errático manejo desde el CEN del PRI –que no es nuevo- de
lo que ocurre en la CDMX no solo amenaza con enrarecer más el ambiente en el
priismo capitalino, sino que podría darle el tiro de gracia si prospera la idea
de imponer, vía dedazo, una dirigencia en los próximos meses. Del río revuelto podrían
pasar al caos.
El que desde hace tiempo levantó la mano y concentra la
mayor cantidad de apoyos internos es el secretario general del PRI Tonatiuh
González, que seguiría en el turno al bat. En medio de las aguas revueltas, por
cierto, Moguel y él mantienen en acuerdo de unidad la dirigencia… Entre tantas
patadas, el que avanzó como aglutinador, en el PRI CDMX, fue Fernando Mercado
de La Magdalena Contreras. Reunió a todos en su territorio… Hablando de jefes
delegacionales tricolores, buenos números presume el de Cuajimalpa, Miguel
Ángel Salazar quien encabeza una de las delegaciones donde mejor se vive en la
capital, según datos de GCE. Nada mal, sobre todo si trae en el radar una
candidatura para 2018.
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