Petróleos Mexicanos compró en 2014 un
avión Cessna Citation Sovereign con el fin de vigilar la red de ductos y evitar
el robo de combustible. Pero el entonces director Emilio Lozoya Austin lo usó
para ir y regresar de destinos de playa como Cancún, Zihuatanejo y Huatulco.
En 21 ocasiones fue a Estados Unidos
a riberas más exclusivas: Westhampton y Esthampton en Nueva York, de acuerdo
con las bitácoras de vuelo entregadas por la Secretaría de la Defensa Nacional
a la Auditoría Superior de la Federación.
En febrero
de 2016, el escándalo de OHL lo alcanzó.
Lozoya le presentó su renuncia a Enrique Peña Nieto. ¿Y el avión? En “los
activos fijos” de Pemex, evidenciados por la Auditoría en enero de 2017, no
está registrado. APARECE SU MILLONARIA COMPRA; PERO EL AVIÓN EN FÍSICO, NO.
la ASF observó que la aeronave no
había sido “capitalizada” al activo fijo conforme a la normativa. Además, faltó
incluir tres helicópteros Bell 407. En total, una cantidad por 94,690.3 miles
de pesos.
Ahora, ¿por qué volaba tanto Emilio
Lozoya Austin? ¿Quién lo acompañaba? La Administración de Pemex, bajo el cargo
del ex funcionario, dejó toda esta información bajo #DatosCerrados. El Cessna
Sovereign es un avión ejecutivo de ocho plazas; pero Pemex le informó a la Auditoría
que no apuntó en ningún registro los nombres de los otros viajeros en los traslados
que realizó Lozoya Austin. Tampoco hizo ninguna nota del motivo de los vuelos.
Del avión
Cessna Sovereign, la ASF indica en su reporte: “Todos los vuelos se solicitaron
telefónicamente a la Sedena por la Dirección General de Pemex. Al respecto, la
Sedena elaboró bitácoras en las que se indica el destino al que se trasladó al
“DG” (Director General) y pasajeros, sin especificar los nombres de sus
acompañantes. Cabe señalar que, en
cuanto a la justificación de los destinos y nombres de los pasajeros, la Sedena
informó que esa es responsabilidad de Pemex; no obstante, dicha Secretaría, por
su experiencia en la operación de aeronaves, debió haber dejado constancia del
nombre y cargo de los servidores públicos que abordaron el avión,
independientemente de que Pemex lo indicara”.
Para evitar el robo “hachicolero”,
Pemex, bajo la Dirección de Emilio Lozoya Austin pidió recursos para el
proyecto de inversión “Fortalecimiento de las Capacidades Operativas de Pemex
por 1,114,272.8 miles de pesos. Además, el Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos
aprobó la creación de la Subdirección de Salvaguardia Estratégica (SSE),
adscrita a la Dirección Corporativa de Administración y Servicios, en cuyo
cargo quedó el General Eduardo León Trauwitz.
Esta Subdirección era el área
responsable en Pemex de la administración y operación del avión. Pero emitió
una nota informativa con la que notificó que no genera información del motivo
de los vuelos ni nombre de los pasajeros. Al respecto la ASF asentó que esta
instancia no hizo los registros, “a pesar de ser quien salvaguarda y custodia la seguridad de
las operaciones de Pemex y sus funcionarios; administra los recursos
tecnológicos (avión) y coordina la transportación aérea de personal conforme a
lo establecido en el Estatuto Orgánico de Petróleos Mexicanos modificado en
septiembre de 2014 y el 28 de abril de 2015, ambos publicados en el Diario
Oficial de la Federación”.
LOS ALTOS
VUELOS EN LA CdMx.
Sus altos vuelos no sólo los hizo a
destinos de playa. En el helicóptero Eurocopter EC-145 201, también adquirido a
través del proyecto de inversión para vigilar las instalaciones, Emilio Lozoya
fue a la Torre GAN (donde se encuentra la sede de Altos Hornos de México),
Toluca, el periódico El Financiero, el Hospital Central Militar, el Hospital
Ángeles, el Parque Bicentenario, la Torre IUSA, Atizapán, Valle de Bravo,
Cuernavaca, el Hotel Hilton, el Hotel One y Teotihuacan, según la bitácora que
reproduce la ASF.
En el
análisis de las bitácoras de vuelo proporcionadas por la Sedena a la ASF, se
determinó que el helicóptero realizó 193 horas de vuelo (11,580 minutos) en 727
traslados en 2015, lo que equivale a dos traslados por día (727 traslados en
365 días) con una duración promedio de 16 minutos cada uno.
Sus vuelos más frecuentes en el
helicóptero fueron a la Torre Arcos y la Torre GAN. 94 veces el ex funcionario
se trasladó a la Torre Arcos, ubicada en Paseo de los Tamarindos, Colonia
Bosques de las Lomas, Delegación Cuajimalpa, Ciudad de México. Y otras 54
fueron a la Torre GAN, en Campos Elíseos, colonia Polanco.
El helicóptero tiene siete plazas.
Pero tampoco quedó registro de los nombres de quienes pudieron acompañar a
Lozoya Austin. La
Auditoría evidenció: “Todos los vuelos se solicitaron telefónicamente a la
Sedena por la Dirección General de Pemex. Al respecto, la Sedena elaboró
bitácoras en las que se indica el destino al que se trasladó al “DG” (Director
General) y pasajeros, sin especificar los nombres de sus acompañantes. Cabe
señalar que, en cuanto a la justificación de los destinos y nombre de los
pasajeros, la Sedena informó que esa es responsabilidad de Pemex; no obstante,
dicha Secretaría, por su experiencia en la operación de aeronaves, debió haber
dejado constancia del nombre y cargo de los servidores públicos que abordaron
el helicóptero, independientemente de que Pemex lo indicara”.
Por sus viajes en el avión y
helicóptero de Pemex, Lozoya fue llamado a comparecer en la Cámara de
Diputados, pero renunció dos días antes. En su lugar se presentó quien lo
sustituyó José Antonio González Anaya. Ante los diputados, indicó que el
convenio para comprar la flotilla de aviones quedó bajo reserva y no brindó ni
un dato más.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario.