Tatiana
Clouthier.
Corrí con
mucha velocidad durante 2018 y mi carrera fue más por el país que por el estado
de Nuevo León. Esta carrera hizo que no le pusiera la atención necesaria a los
problemas que pasaban en mi municipio, aunque no por ello estuve ausente.
Seguía viendo que la basura pasaba sin falta, a la hora usual y cada tercer
día. Observé que la seguridad, al estilo de Fernández Garza, estaba “muy bien”;
que las calles seguían con sus horribles baches y problemas cotidianos de
tráfico.
Es claro que
no soy indiferente a los problemas, sin embargo, al ser un nuevo gobierno,
había preferido estar al margen del mismo para que ninguna de mis opiniones se
interpretara de manera sesgada. Por ello, me negué a opinar cuando hubo un
muerto en San Agustín, o cuando apareció el balaceado en el centrito de la del
Valle; cuando ocurrió aquella balacera de Lázaro Cárdenas que hasta se llegó a
cerrar la calle un buen rato y en un largo tramo; ante lo ocurrido con los
robos a menores y hasta la incierta muerte de un joven de apenas 24 años que
recibió cuatro balazos.
Sin embargo,
ya con el tema del incendio de automóviles en Las Torres y los robos afuera de
un supermercado a plena luz del día, no puedo callarme. Era de esperarse que la
ciudadanía se haría escuchar como así ocurrió el domingo pasado cuando un grupo
de ciudadanos salió a la calle a marchar de forma simbólica para pedirle al
alcalde que se atendiera la seguridad. Cosa curiosa hizo el mandatario, pues el
mismo día y a la misma hora salió ante un grupo de ciudadanos a explicar o
justificar tanto desorden y descontrol en este municipio en términos de la
seguridad pública.
Considero
que –como le dije al propio mandatario cuando me platicó de su intención para
participar en la alcaldía–, él tiene buenas ideas, pero su fuerte no es la
implementación de las mismas. Llama la atención además escucharlo en la radio
hablando apenas de pruebas de confianza cuando él fue miembro del Consejo
Nacional de Seguridad. Con esto reitero que es muy buen consejero mas no un
buen operador y, al final del día, lo que un municipio requiere es operación y
materialización de esas buenas ideas.
Por el bien
de San Pedro, pido aprenda rápido, pues no hay tiempo para jugar a la
consejería. Ya me tocó ver la lentitud con la que se atienden los problemas de
alumbrado público e incluso problemas mínimos como los de tránsito en distintos
sectores del municipio.
¡Suerte nos
deseamos!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario.