Javier Risco.
En un mismo
día la información del aeropuerto de Santa Lucía ha pasado de ser afectada por
un cerro y aumentar su costo, a un pronunciamiento de la Secretaría de
Comunicaciones y Transportes desmintiendo esta información y cerrar con un
anuncio presidencial sobre el inicio de su construcción el próximo lunes. ¿Qué?
¿Así ya? ¿De la nada? Sí.
Por partes,
una nota firmada por el periodista José Raúl Linares, publicada en Proceso,
señalaba la mañana de ayer: “Omite Riobóo presencia de cerro en Santa Lucía y
presupuesto para aeropuerto se eleva en 8 mil 215 mdp”. La fuente de la
información es un informe publicado por la Secretaría de la Defensa Nacional,
titulado “Manifestación de impacto ambiental modalidad regional, del Proyecto
'construcción de un aeropuerto mixto civil/militar con capacidad internacional
en la base aérea militar No. 1'”, cuya autoría recae en el capitán Robinson
Ismael Ramírez González, encargado de los estudios ambientales del proyecto,
así como por la Universidad Nacional Autónoma de México. En él se apunta: “Uno
de los principales problemas detectados en la planeación para la ubicación de
las pistas lo constituye la presencia del Cerro de Paula, cuya elevación máxima
es de 2,625 metros sobre el nivel del mar, para la ubicación de la pista sur”.
De acuerdo con los estudios de impacto ambiental, es necesario mitigar este
'obstáculo natural' aumentando un 11.7 por ciento el presupuesto del proyecto
hecho por Grupo Riobóo y presentado hace algunos meses a los medios.
Tras esta
información, tuvo que salir el secretario de Comunicaciones y Transportes,
Javier Jiménez Espriú, a descartar este supuesto incremento, porque, aunque
existía un plan maestro proyectado por Grupo Riobóo, la responsable de la
construcción es la Secretaría de la Defensa Nacional. De esta forma descalificó
las proyecciones previas presentadas por el propio gobierno, las cuáles
indicaban una inversión de 70 mil 342 millones de pesos. Señaló que José María
Riobóo es sólo un asesor del presidente, pero no tiene injerencia en el
aeropuerto de Santa Lucía.
Sumado a
esta polémica, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que el
proyecto del aeropuerto comenzará su construcción el lunes. Y lo hará con el
nombre del general Felipe Ángeles. Ese mismo día se explicará algo llamado el
'Plan Maestro del Aeropuerto Internacional de Santa Lucía', y se colocará de
manera simbólica una primera piedra.
Las últimas 24 horas han sido un
desastre respecto a uno de los proyectos más ambiciosos del nuevo gobierno, no
ha sido presentado de manera formal un estudio de impacto ambiental, no se
tiene un proyecto ejecutivo formal (porque ni siquiera se ha tenido el tiempo
para realizarlo) y la poca información que se tiene es insuficiente y
descalificada por expertos en temas aeronáuticos.
Al menos el
gobierno ha sido consistente con su improvisación; del tren maya tenemos ocho
diapositivas y el permiso de la tierra –hasta ayer se anunció que la UNAM
colaborará con este proyecto–, nada más, no hay proyecto ejecutivo ni mucho
menos un estudio de impacto ambiental en la zona, tal vez este último punto el
más preocupante.
La confusión crece en los vacíos, la
expectativa por saber qué presentará el gobierno de López Obrador el próximo
lunes es enorme, todo indica que será otra puesta en escena donde se privilegia
la forma sobre el fondo.
El lunes nos
daremos cuenta que el menor problema del nuevo aeropuerto es un cerro.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario.